Seguro que llevas dándole vueltas desde el pasado año a qué lugar ir este verano. Y es que quieres unas vacaciones originales porque estás harto de la costa y de encontrarte con la mitad de tu ciudad en el mismo destino… Renovarse o morir dicen, y este es el momento de dirigir tus pasos a otros lugares para descansar y conocer otras culturas que nada tienen que ver con la tuya.
Si has elegido los países bálticos (Estonia, Lituania y Letonia), pero no tienes demasiado claro qué cosas no te puedes perder en tu visita, tranquilo, vamos a echarte una mano.
Tres países, tres culturas: lo mejor de visitar los países Bálticos
En Estonia, por ejemplo, lo ideal es alojarse en un lugar turístico que te permita moverte con facilidad como, por ejemplo, Tallín. La magia de esta ciudad es impresionante, ya que conserva ese toque del medievo que la hace tan especial y que te dejará boquiabierto en cada calle y cada rincón. Desde Tallín se puede coger un tren que te llevará a San Petersburgo. Si tienes tiempo, no puedes perdértelo.
Los balnearios son muy populares en los países bálticos, así que nada mejor que acercarse por Druskininkai, en Lituania, y mimar tu cuerpo con sus populares baños de barro.
Pero si hay una visita curiosa en este país es la del Museo de la KGB, situado precisamente en lo que fue su antigua sede. Allí podrás conocer algunas de las atrocidades que se cometieron durante la ocupación soviética. Como contrapunto, visitar el Vilna Ghetto, un gueto judío durante la ocupación nazi en el que vivieron miles de personas, también es una buena forma de entrar en contacto con la historia más reciente y terrible.
Qué hacer en Letonia
Si el destino es Letonia, nada mejor que instalarse en Riga y empaparse de su amplia cultura. Pero aparte de eso, Riga ofrece diversión y buena gastronomía. Fascinantes en Letonia son también sus espectaculares playas de arena blanca en el cabo Kolka, así que si echas de menos un poco de turismo playero, podrás quitarte esa espinita visitando esta preciosidad y degustando los arenques y su impresionante cerveza casera. Si además quieres darle un punto romántico, alquilar una cabaña en la orilla de alguno de sus lagos será todo un acierto.
Estos son solo algunos lugares que no te puedes perder al visitar los países bálticos, pero hay muchos más. ¿A qué esperas para descubrirlos?
